jueves, octubre 27, 2005

Sombras

Con esto del cambio de casa sigo encontrando cosas... Aquí va algo que escribí el año 2000 para mi curso de Redacción General I:

A lo lejos una sombra, repite mi nombre y me invita a pasar.

La oscuridad no es algo nuevo para mí, tal vez ni siquiera recuerdo cuando la conocí. Lo más probable es que haya sido aquel día en que me encerré entre estas celdas, aquel día en que decidí dejar mis instintos de lado y ser igual a los demás, aquel día que dejé de vivir para mí.

Durante mucho tiempo disfruté el juego. Ser aceptada por esta sociedad hipócrita me parecía bien y cómo no, si yo también me volví hipócrita.

Dejé de reír, para transformarme en lo que soy, alguien totalmente normal dentro de los cánones que determinan la manera de actuar de las personas dentro de esta sociedad.

Dejé de sufrir, para que las personas a mi alrededor estuvieran contentas.

Dejé de ser yo, para ser la que me decían que tenía que ser. Y con eso, me dejé de escuchar y aprendí a ser sorda, a no oír a mi corazón y a creer que cada momento de confusión -los cuales eran seguidos- eran sólo pasajeros.

Comencé a creer que los demás eran más importantes que yo y que mi silencio era mejor. Ya que no se me permitía hacer sufrir a los otros.

Entonces, como dejé de vivir, empecé a vivir la vida de otros. A ser feliz con sus alegrías y a entristecerme con sus penas. Porque tampoco se me permitía expresar mis sentimientos.

Pedí ayuda, grité, supliqué, pero nadie quiso escucharme, nadie quiso llevarme a la luz. Así, un día, tuve que darme cuenta de que estaba sola, sola con mi hipocresía.

Quise buscar una salida por mis propios medios. Caminé y caminé, siempre en círculos, para terminar en el mismo lugar que había comenzado.

Ahora me encuentro en la mitad de mi camino. A un lado la luz; al otro, la oscuridad, la cual siempre es más fuerte y arrastra más.

En esta lucha se me va la vida, mi vida y no sé si llegaré a la luz antes de que la muerte me venga a buscar...

miércoles, octubre 26, 2005

Recuerditos, tonteritas y demases...

Los últimos días han sido algo extraños con todas las cosas que están pasando... Cambiarse de casa puede ser algo verdaderamente traumático. Juro que llevo como 10 cajas embaladas y todavía veo que mi pieza sigue igual de llena de tonteras.

Con tanto dar vuelta mis cosas me he encontrado con más de algún objeto que daba por perdido... Como ese bolsito regalo traído de Turquía por mis suegros hace más de cinco años... o una que otra foto o carta escondida en algún rincón.

Mi pieza actual es de tamaño normal, no grande pero tampoco muy chica. Lo justo. La próxima sí va a ser más pequeña y paso las noches pensando cómo voy a hacer para que entren los pocos muebles que tengo... y, sobre todo, mi amado computador. De verdad que el tema me tiene mal porque justo hace sólo unas semanas había logrado arreglar la conexión inalámbrica que me permite conectarme desde mi pieza sin molestar a nadie en mi casa.

Soy de esas personas que guardan cosas. Demasiado cachurera, lo reconozco, pero es que creo que cada cosa esconde un recuerdo invaluable..., desde una flor hasta una boleta cualquiera. Eso sí que ahora embalando me doy cuenta de que debo deshacerme de una vez por todas de cosas que para cualquier otra persona no serían más que simple basura... Pero me cuesta porque al parecer me aferro mucho más de lo normal...

Ahora me siento como si estuviera en algún tipo de terapia de desapego... Habrá que ver si me convierto en una persona más práctica...

lunes, octubre 24, 2005

¿Vamos a jugar?

Empieza la función, me pongo mi máscara y salgo a jugar. Como en una obra de teatro sólo me dedico a actuar mi papel, ese que siempre he interpretado. Todo funciona mejor cuando no incomodamos.

Tal como hablamos el otro día con la Anita, creo que estaba haciendo demasiado reales a mis problemas y siempre es más fácil guardarlos y seguir adelante que hacerse cargo de ellos. ¿Esto es el optimisto o simplemente una forma de escapar?

Vamos, ahora sí que se puede...

sábado, octubre 22, 2005

Una más

Es oficial: Las cosas siempre pueden ir un poco peor...

jueves, octubre 20, 2005

Justo en la mitad

Dos meses exactos quedan para mi tan esperado encuentro. 60 días y mis ansias empiezan a crecer cada vez más. Hoy no puedo dejar de pensar en un par de cosas que no me han dejado dormir bien las últimas noches.

No me gusta contar los días, creo que esta estrategia me ha servido esta vez para que el tiempo no parezca tan eterno. A pesar de mi plan alguien por ahí me hizo ver esta realidad. Por una parte me gusta pensar que ya pasé más de la mitad del tiempo, pero por otra se vuelve todo más complicado al imaginarme todo lo que falta para llegar.

Una de las cosas que menos me agrada es esperar y claro que me ha tocado hacerlo mucho más de lo que me gustaría. En estos momentos es como hacerle una pausa a tu vida para que las cosas comiencen a pasar más adelante, para que lo bueno venga después. Es rara esa sensación de que te quedas viendo como todo pasa frente a tus ojos y dejas de ser protagonista de tu historia.

Esperar que llegue para mirarlo a los ojos, esperar hasta encontrar un trabajo, esperar a que la salud no nos deje demasiado rápido, esperar... Y no es que me siente a hacerlo, pero cuando ya se agotan las posibilidades no hay mucho más que hacer. Sólo me queda pensar que las decisiones que tomo en este momento no son las equivocadas, que no dejaré que mi vida pase para darme cuenta al final de ella que ya es demasiado tarde, que dejé pasar las cosas que eran importantes...

En el fondo quiero creer que todo es una preparación para lo bueno que viene más adelante...

martes, octubre 18, 2005

Para ser bella...

Supongo que todos hemos visto en las noticias de los últimos días el caso de la mujer que quedó con muerte cerebral luego de someterse a una abdominoplastía. Respecto a esto no queda mucho más que decir. Obvio que es el colmo lo que pasó y supongo que mi reflexión tampoco es nada de novedosa, pero igual me queda dando vueltas el hecho de hasta dónde podemos llegar con tal de obtener diversos fines.

Por una parte, una persona inescrupulosa capaz de engañar, estafar y dar muerte a alguien que debido a la ignorancia y desesperación pasa por alto todo tipo de señales que indican que algo no anda bien. El punto de encuentro entre estos dos protagonistas de la historia es el dinero. El médico capaz de hacer cualquier cosa por ganarlo y la paciente buscando ahorrar ante todo.

Casi todos hemos pensado en algún momento cómo sería si nos arregláramos una u otra cosa de nuestro físico, pero la mayoría de nosotros nos abstenemos al pensar el alto costo que pueden llegar a tener este tipo de procedimientos. Eso si somos responsables y no hacemos caso a ofertones de dudosa procedencia. Pero el problema se inicia cuando por desesperación creemos que en nuestro caso las cosas sí van a salir bien, no tomando en cuenta nada...


Me impresiona la búsqueda desmedida de la perfección del cuerpo, cuando lo único que deberíamos tener presente es que casi todos tenemos uno que otro "complejito" que nos hace ser naturales frente al mundo y creo que de eso nadie se salva.

lunes, octubre 17, 2005

El problema de generalizar

Siempre me ha llamado la atención esa obsesión que tiene la gente en su mayoría de generalizar las cosas.

Por ejemplo, empieza la primavera y se supone que todas las personas tienen que enamorarse. Yo no sé, pero creo que el sentimiento nace sólo cuando es el momento adecuado para cada uno, no por la estación del año. Lo que encuentro más triste es la frustración a la que pueden llegar algunos si es que se encuentran solos. Me acuerdo que a eso de los 15 era como que el mundo se te iba a acabar, sobre todo cuando a tu al rededor todos parecían encontrar a su media naranja. De todas maneras me parece dudoso ya que creo que al final tanto emparejamiento al mismo tiempo responde más a la desesperación que al amor.

Más encima los días no han dejado de ser invernales por completo.

Lo mismo pasa para el 14 de febrero. Resulta que ese día en especial TIENE que ser el más romántico del año, aunque no te nazca ni la más mínima emoción. No importa si te peleaste, si quieres terminar o si no tienes ganas; el día de los enamorados es para celebrarlo y pobre del que no lo haga como se debe porque corre el riesgo de ser juzgado por el resto.

Si tienes las cosas claras, todo bien. Pero si por culpa de la edad no has madurado lo suficiente, empiezan los problemas. Y yo conozco a más de alguno/a que ya tienen hartos años encima y una que otra experiencia, y aún así no aprenden que no todos podemos responder de la misma manera... Exigen una y otra vez vivir todo lo que se nos ha dicho que está bien vivir... Pero yo creo que la gracia está en disfrutar de las diferencias y cosas nuevas que nosotros mismos nos podemos dar, aunque sea en soledad.

sábado, octubre 15, 2005

Gracias a Google

Hoy es uno de esos días neutros... Me desperté temprano como siempre, pero con menos ganas de lo normal. Es que este sábado nublado no me da mucha energía...

Supongo que si todo fuera como antes, después del almuerzo tendría toda una tarde viendo reportajes y durmiendo siesta a ratos. Ojo que no es tan patético como suena porque la compañía sería buena. Más tarde nos reiríamos, nos molestaríamos y empezaríamos a pensar qué cosa rica hay para comer..., creo que hoy hubiera sugerido helados... Me imagino que habríamos ido a comprar después de mi constante insistencia.

Claro que las cosas no son tal cual como me gustaría. A cambio me tengo que conformar por una conversación distante via messenger, con toda la impotencia que eso me provoca. El tiempo es raro conmigo, a ratos avanza con pasos acelerados, pero la mayoría del tiempo es como en cámara lenta. Hoy es uno de esos días lentos.

En el último tiempo, como nunca, he recurrido a Google para conseguir todas las respuestas. Como si fuera una especie de Gurú capaz de solucionarlo todo. Creo que muy pronto recurriré a él para buscar algún grupo de apoyo o algo por el estilo. Supongo que podría encontrar uno que se llamara "Club de los que esperan" o algo parecido. En una de esas me encuentro con gente que lleva más tiempo en esto y me da algunas pistas para que todo pase más rápido y de una manera más fácil. Quién sabe... Seguro que Google me da la solución...

miércoles, octubre 12, 2005

Recuerdos

Ordenando mis cosas para mi cambio de casa me encontré con algo que escribí hace más de tres años durante alguna clase en la universidad. Me acuerdo que estaba confundida, bien complicada... Ahora lo comparto como parte de mi pasado, sólo eso y bien guardado...

Martes 4 - hace una semana - locura - hoy - recuerdos - ganas de volver atrás - ¿se podrá retroceder el tiempo? - pareciera que no - una buena conversación - risas - consejos - amistad - opiniones - pseudo discusiones - entretenidos - ¿una cerveza? - hartos cigarros - palabras - emoción - recuerdos - sorpresa - escape - pensar - caminar - pensar - caminar - mentir...

martes, octubre 11, 2005

Éstas son las mañanitas... (leáse en tono de canción)

Ya que ha pasado más de medio día y nadie lo ha notado, me saludo yo misma. Hoy es mi santo y no es que espere nada especial, simplemente lo quiero recordar.

Algunas personas encuentran que el día del santo es ultra importante, sobre todo las abuelitas (aunque las mías nunca fueron de ese tipo). Familias enteras se juntan a tomar once hasta con torta y flores incluídas. Mi familia no es de esas, con suerte se hace algo para los cumpleaños y porque uno presiona, así que se entiende que hoy nadie se haya enterado.

A mí, en realidad, me tiene sin cuidado, porque me pasaría de patuda si es que me sintiera ya que yo nunca me acuerdo del santo de nadie y si lo hago creo que no amerita para estar llamando ni nada por el estilo. Por eso me saludo yo misma.

Hoy las cosas han estado un poco mejor, por lo menos veo con más claridad, lo que me hace tener esas ganas de querer celebrar lo que sea. Y si tiene que ver conmigo harto mejor. Perdón por el egocentrismo extremo, pero hoy, 11 de octubre, es lo que hay...

lunes, octubre 10, 2005

Un feriado

Hoy el día está como para ir a dar un paseo y tomar helados. Me encantan los helados, esos ricos del Sebastián, por ejemplo. Hubo una época en que los tomaba varias veces en una semana, era como un panorama obligado. Por suerte en aquellos días mi cuerpo no asumía kilos demás, así que las cosas eran simples.

Hoy que está bonito sólo me hace falta algo de compañía para poder compartir. Ayer, en cambio, tuve una tarde entretenida. Con la Francesca fuimos al Estadio Español a la celebración del día de la raza. Dimos vueltas, tomamos sangría, comimos buñuelos ultra aceitosos, vimos a la Loreto bailar su baile riojano y aprovechamos bien la tarde. Después me vine temprano para mi casa. Es que con estos días y este horario de verano dan ganas de hacer más cosas, sobre todo cuando me resisto a la idea de embalar para el próximo cambio de casa...

viernes, octubre 07, 2005

Para mí

Llevo varios días sin escribir y es que en verdad se me ha hecho algo difícil... Pero como una manera de distraerme me estoy obligando a hacerlo.

En un par de días me he tenido que transformar en una persona distinta, aunque sea sólo algo que trato de proyectar pero que no es cierto en realidad.

Creo que nunca estamos preparados para enfrentar los momentos difíciles y sólo puedo pensar que sería capaz de renunciar a muchas cosas con tal de cambiar el rumbo de lo que pasa.

Con todo esto me tengo que enfrentar a uno de mis grandes miedos: manejar. Hace años que renuncié a los autos y ahora que me veo obligada no sé cómo podré resolver esto. Supongo que por primera vez no puedo salir de esto. Tratando de ver el lado positivo creo que es una buena oportunidad para mí. Primero tengo que renovar aquella olvidada licencia...

Bueno, como verán lo que me falta es inspiración... Espero no estar aburriendo mucho con mis palabras, pero hoy esto es sólo para mí. Más adelante iré resolviendo este problema de creatividad...

martes, octubre 04, 2005

Hoy

Digamos que hoy no tengo ganas de escribir... Pasé una mala noche pensando en más de alguna fatalidad y en las cosas que haría para cambiar el rumbo...

Si tuviera "Fe" tal vez me aferraría a un ser superior y creería que las cosas pasan por aquel plan que está destinado para todos nosotros. Eso si pensara de otra manera... Por ahora me resultan más tangible las noticias que una amiga me puede dar para alentarme, sólo eso.

Ahora, simplemente no entiendo... Aunque lo único que puedo pensar es que ya viene la calma. Seguro que ya viene...

domingo, octubre 02, 2005

Cuidado!!! Puedo provocar adicción!!!

Ayer, por primera vez en la vida, conseguí llegar a un lugar después que la Francesca. Todo un logro para mi maniática puntualidad...

Quedamos de juntarnos a las 10:15 pm. Claro que yo sabía que no me tenía que confiar así que esperé la llamada de rigor, me senté un rato y después salí de mi casa.

Como tantas otras veces, y debido a nuestra calidad de peatonas, nos juntamos en la esquina de Colón para empezar con nuestro carrete. Esta vez, como ya dije, ella me estaba esperando. Aprovechando la noche caminamos hacia nuestra primera parada: El Estadio Español y la elección de su reina. Ya en la entrada supuse que las cosas iban a ir sucediendo tal cual pasaron. Nos quedamos paradas viendo el show, esperando que la amiga de la Fran que era candidata saliera a desfilar y de tanta expectación hasta yo me puse nerviosa por ella. Al frente Pato Laguna trataba de animar y la Fran me decía que los vestidos de las bailarinas eran bonitos, volvía a mirar y se arrepentía... Después de eso mi amiga decidió que había que conseguir algo de vino a como de lugar... y lo logró. Luego volvió una y otra vez a insistirle al mozo que a esas alturas ya era su amigo.

Acabado el evento nos fuimos a una fiesta que nadie sabía muy bien de qué se trataba. Por lo que logré entender la casa va a ser demolida y ésta era la despedida. El viaje de ida fue silencioso, las dos nos mirábamos y sabíamos exactamente lo que estábamos pensando: "¿en qué nos estamos metiendo?" Y yo la miraba y le decía: "esto es culpa tuya".

Cuando entramos creo que hasta miedo nos dio pero como ya estábamos ahí no había mucho más que hacer, nos instalamos y decidimos quedarnos juntos. Ya para el momento que llegaron nuestras provisiones las cosas se empezaron a arreglar. Es increíble lo que hace un pisco a favor del humor.

El resto de la noche fue como una película con capítulos entre cortados... La Fran al frente mío compartiendo con nuevas amigas "shuper locas", la Loreto dando vueltas, mucha gente subiendo por la escalera, la Pauli y su amiga al otro lado, yo arreglando el mundo y contándole todas mis penas a Ignacio..., algo de baile, unas vueltas más y después el triste aviso de que ya era hora de irnos. En el auto de vuelta la Fran queriendo que contara mis secretos más oscuros y jurando que nadie escuchaba... Más risas y el compromiso, con apretón de mano incluído, de vernos el lunes y hacer pisco sour.

Hoy, domingo, las horas de sueño menos se sienten. La Fran diciéndome que tenemos que salir mucho juntas porque lo pasamos bien, confirmando que viene mañana y presionando para que escriba de ella. Definitivamente creo que se hizo adicta a mí.