domingo, febrero 17, 2008

En estas dos semanas

Y pasaron las vacaciones, muy a mi pesar demasiado rápido... Pero aunque fueron sólo dos semanas al final el recuento me dice que estuvieron "redonditas".

El sábado 2 lo dedicamos a preparar las cosas, cada uno por su lado y con mi papá nos dimos el tiempo de mirar videos familiares antiguos. Ese día la palabra "nostalgia" fue lo que más escuché. Fueron imágenes de la tía Marlene, de mi mamá alegando tonteras, de apuestas con el juego de "La Bolsa" y de los perdedores bañándose en el mar a la hora de la puesta de sol.

Entonces las vacaciones partieron el domingo 3 de febrero en Maitencillo. Estaban los papás, los Toledo, la Caro, el Pé, el Lucas y la Mora. Lo primero fue sorprenderme con los arreglos a la casa. Lo que pasa es que mi casa tiene algo así como 50 años y no digamos que durante este tiempo ha tenido todos los cuidados que se merece, porque pucha que la aprovechamos. Bueno, la cosa es que se les ocurrió que era momento de un cambio ahora que seguiremos con ella en vez de arruinar el entorno con un feo edificio... y tenemos cocina nueva y equipada, baño que parece de Santiago y pintura, que aunque no es de mi total agrado, al menos es nueva y no descascarada.

Los días increíbles, el mar estuvo como nunca y me bañé muchísimo aunque el pololo no me acompañó nunca..., incluso en la playa se preguntaban si era verdad que andaba acompañada y yo no dejo de pensar si las amigas de la Caro me creerán media loca... El Lucas aprendió a estar sin correa sin salir arrancando como loco. Y las noches fueron de piscolas compartidas, de los pololos hablando de WOW y de adicción colectiva a "Amor Ciego". Sí, es que en la familia tenemos eso de pegarnos todos juntos con los realities. Con Rodrigo sólo salimos una noche a comer rico al Puntamai y a la Canasta, y otra a tomar once-comida al Ayén con la Caro y el Pé. Y así de rápido se me fue la primera semana...

Al sábado siguiente nos fuimos a Los Andes, al cumpleaños n° 30 de la hermana de Rodrigo. Después del asado rico seguimos el domingo nuestro viaje a Rapel.

En Rapel arrendamos una casa que por las fotos prometía y cumplió todas las expectativas. Era grande y cómoda, con linda vista y una piscina perfecta para mí. Sólo tuvimos un problema: no teníamos juguera o coctelera, ni exprimidor... Pero como no podíamos dejar de tomarnos un sour a nuestra llegada nos las arreglamos con nuestras manos y un frasco para conservas. Igual nos quedó rico y me sentí al más puro estilo de "A prueba de todo" arreglándomelas con lo que encontraba...

Fueron ricos los días en el lago, aunque éste no estaba para nada en óptimas condiciones. A mí eso no me importó porque tuve todo lo que quería y días increíbles para compartir en éstas, nuestras primeras vacaciones. Después llegó la Cata y esperamos que le hayan servido estos días fuera de todo lo conocido.

Y ahora de vuelta al trabajo y a la realidad, con fuerzas para hacerle frente a todo lo que viene y muy feliz por lo que logramos formar...

viernes, febrero 01, 2008

Febrero

Por fin. Me voy de vacaciones a disfrutar de dos semanitas fuera de esta ciudad.

Destino: Maitencillo, Los Andes, Rapel.

Me voy a descansar, tomar sol y aprovechar de todo, pero sobre todo de compartir con el pololo.

Nos vemos en poco más de dos semanas!