lunes, febrero 05, 2007

Hombres Chocolate

Desde que tengo algo así como 5 años yo vengo imaginándome cómo sería mi príncipe azul. Creo que durante mi niñez y el comienzo de mi adolescencia idealicé al que seguramente sería ese hombre especial para mí.

Hoy, a los 25, creo que ya aprendí que las cosas no eran así como las imaginé.

El príncipe azul sería ese que me iba a llenar de flores y chocolates, me daría sorpresas de lo más encantadoras, ese regalo especial y me haría sentir lo más importante en este mundo. Después de un análisis más o menos acabado en base a mi experiencia puedo decir que ese hombre sí existe, pero con un lado mucho más oscuro de lo que aparenta. Éste vendría a ser el "hombre chocolate".

El Hombre Chocolate es una maravilla cuando quiere, pero su gran defecto está en que será una maravilla no solo con una, sino que con todas las que pueda. ¿Alcanza para todas? Son tantas sus ganas de hacerte feliz que cree que se la puede con más y, sin dudas, en algún momento querrá más.

Y después que te das cuenta de esto, que emprendes tu retirada en busca de algo mejor aparece su opuesto. Como si por una ley del equilibrio hubiera que compensar. Él te da la seguridad y la tranquilidad tan necesarias, pero de flores y chocolates mejor ni hablar...

Pero acá no tenemos la opción de apretar el botón de la licuadora y mezclar a nuestra conveniencia. No. Supongo que sólo queda ver cuáles son nuestras prioridades.

4 comentarios:

Princessa dijo...

Sabes, me gustó mucho tu post, a pesar de que me hago llamar princesa y me gustan los castillos y todo eso. La verdad es que la vida me ha hecho poner los pies sobre la tierra. Concuerdo contigo hay un tema de prioridades lo importante es saber que primero te conozcas bien a ti misma y sepas que es lo que quieres y esperas. Luego ver tus prioridades y definir en que cosas estas dispuesta a tranzar y en cuales definitivamente NO.
Salu2

Nelson Alvarez dijo...

Complicado el tema para el hombre chocolate, sobre todo cuando le toma más el gusto a endulzar que a la endulzada que tiene al frente.

Quizás el problema está en la mujer insegura que se pone celosa del hombre chocolate cuando este en realidad tiene ojos para su amada, y a las demás solo trata de endulzarlas por endulzar. Quién sabe.

Buen punto en todo caso...

Saludos!

Soledad dijo...

Sole, si hay algo que hay que tener presente desde que tenemos uso de razón, es que no todos los príncipes se visten de azul.

Las tonalidades son en lo que nosotras mismas vamos transando.
Pero lo que yo veo en colores veo que tú lo distingues en sabores... no está mal, eh?

Muchos cariños,
Sole.

Robe dijo...

a veces el chocolate = te puede quedar amargo por factores que quizas no estas conciderando.

Nadie es 100% como se muestra y la verdad se conoce tarde o temprano.

no es pa tanto tampoco.. jajajj