Motorizada

¿Y qué importa la crisis? Yo por fin voy a tener mi auto propio y no puedo más de emoción...

Junté peso a peso, esperé años y lo conseguí... Será chiquitito, usado y modesto. Pero será mío gracias a mi esfuerzo...

Estoy FELIZ!!!

Happy ending?

Y quién me iba a decir que estas dos semanas de viaje se iban a transformar en las más decisivas del último tiempo...

Me voy tranquila, di lo mejor de mí..., si no fue suficiente ya no es mucho lo que puedo hacer. Si las cosas no salen bien, sabré levantarme... una vez más. Tal vez no tenía que ser..., yo qué sé... Supongo que ahora tengo que seguir adelante no más, después de todo no sería la primera vez y al menos la experiencia me hace verlo todo más fácil.

Sigo creyendo que me merezco lo mejor y no renunciaré a la idea de tenerlo..., aunque me tenga que demorar lo que me tenga que demorar en encontrarlo...

Me voy tranquila.

Me voy al sur

Me voy, de viaje a la Patagonia... a trabajar eso sí, pero me hago la idea de que habrá tiempo para pasarlo bien también. Al menos el paisaje de todas maneras me acompañará. Quizás en dos semanas más cuente cómo me fue...

Hoy imagino

Hoy inevitable pensar cómo habrían sido las cosas si todo hubiera sido diferente...

Lo definitivo...

Tengo eso de no entender muy bien lo que está pasando, de no saber qué es lo definitivo y qué no... Me pregunto una y otra vez si de verdad las cosas son así de absolutas y no logro hacerme la idea de que esto es realidad... Es como vivir una realidad paralela, como si todo esto fuera sólo un momento y que la verdad es otra.

Yo no entiendo eso de que ya no esté si yo la siento tan cerca. A ratos incluso la puedo ver y sé exactamente lo que me está diciendo... o lo que estaría diciendo... Si me siento en la esquina del comedor en Maitencillo, la veo a mi lado, siento sus manos algo mas heladas que las mías haciéndome cariño y dando esas palmaditas mientras le hablo de cualquier cosa... Si veo su ropa y encuentro la lista del supermercado en su chaqueta de cuero, la veo poniéndosela, arreglándose las mangas del chaleco, doblando el papel y guardándolo en el bolsillo..., después la cartera y la pasada frente al espejo para arreglarse la chasquilla.

La veo, en lo cotidiano y en lo que no es tanto. Y no puedo entender que estoy sola y que realmente no me va a acompañar en el futuro. Me imagino sus consejos, pero me queda el vacío de no escucharlos de su voz. Yo no quería aprender a ponerme el rimel, me encantaría que ella siguiera haciéndolo cada vez que voy a un matrimonio... ¿Y qué pasa si nunca logro hacer la cazuela rica que ella preparaba?

Y me imagino que ya vendrá, que falta poco para que todo vuelva a ser normal... Pero no, me hablan del absoluto y de eso de si ya estoy bien y no sé... Los días pasan llenos de cosas que parecen importantes en el momento y que después no son nada...

Es que simplemente no entiendo lo que es "para siempre"...

Vacío

Volveré a escribir cuando esta pena que me despedaza se haga a un lado, cuando las palabras vuelvan a ser un alivio y mi refugio...

Volveré a escribir cuando la angustia me llene el cuerpo...

No sé. Por ahora necesito descansar...

Stop

Hoy quiero hacer una pausa, no arrancar porque al final siento que me persigue una avalancha que no puedo detener y la culpa es más fuerte que cualquier momento... Quiero una pausa para poder descansar un poco de todo, hasta de mí porque me siento algo abatida... demasiado cansada con esto de mantener la fuerza y las ganas hasta de lo que más quería..., es que a veces nada tiene sentido y nada tiene proyección. Quiero descansar y sentirme en una burbuja inquebrantable, que me cuiden y que no haya nada más... Mañana será distinto otra vez.

Lo que he aprendido

Creo que pocas veces en la vida tenemos la oportunidad de ver las cosas con claridad suficiente, pocas veces somos capaces de abstraernos de lo propio y dejar el ego de lado... Yo no sé si estoy en lo correcto o no, pero al menos tengo la oportunidad de cuestionármelo... y lo hago.

Aprendí que la vida está hecha de un montón de momentos que no siempre son un todo.
Aprendí que cada cosa que me pasa es un simple hecho de la vida y depende sólo de mí la manera en que lo voy a enfrentar.
Aprendí que los grandes dolores no pasan, pero que puedo aprender a dominarlos.
Aprendí que esos dolores me hacen más fuerte.
Aprendí que la fortaleza no es de todos.
Aprendí que lo que me pasa no me hace ni más ni menos especial.
Aprendí que cada día es un regalo que hay que celebrar.
Aprendí que es mejor pasar los días con una sonrisa.
Aprendí que no vale la pena enojarse más de un par de minutos.
Aprendí que hay que saber perdonar, porque hasta el daño que me puedan haber hecho en algún momento fue un aprendizaje para el futuro.
Aprendí a dar las gracias por todas esas veces que a la fuerza aprendí.
Aprendí a pedir perdón.
Aprendí a jugármela con todo por lo que quiero.
Aprendí que amar es lo más lindo y que todos los días sí pueden ser felices entre dos.
Aprendí que en el amor siempre está la posibilidad de perder, pero que podría volver a pararme otra vez.
Aprendí a dejar de lado los miedos.
Aprendí que tengo mucho cariño para dar y que es bueno entregarlo...

Se me podrían ocurrir muchísimas cosas más que agregar a mi lista, pero con esto sólo quiero transmitir que la vida es una sola y que, a pesar de lo bueno y lo malo, hay que aprovecharla hasta el último segundo...

En estas dos semanas

Y pasaron las vacaciones, muy a mi pesar demasiado rápido... Pero aunque fueron sólo dos semanas al final el recuento me dice que estuvieron "redonditas".

El sábado 2 lo dedicamos a preparar las cosas, cada uno por su lado y con mi papá nos dimos el tiempo de mirar videos familiares antiguos. Ese día la palabra "nostalgia" fue lo que más escuché. Fueron imágenes de la tía Marlene, de mi mamá alegando tonteras, de apuestas con el juego de "La Bolsa" y de los perdedores bañándose en el mar a la hora de la puesta de sol.

Entonces las vacaciones partieron el domingo 3 de febrero en Maitencillo. Estaban los papás, los Toledo, la Caro, el Pé, el Lucas y la Mora. Lo primero fue sorprenderme con los arreglos a la casa. Lo que pasa es que mi casa tiene algo así como 50 años y no digamos que durante este tiempo ha tenido todos los cuidados que se merece, porque pucha que la aprovechamos. Bueno, la cosa es que se les ocurrió que era momento de un cambio ahora que seguiremos con ella en vez de arruinar el entorno con un feo edificio... y tenemos cocina nueva y equipada, baño que parece de Santiago y pintura, que aunque no es de mi total agrado, al menos es nueva y no descascarada.

Los días increíbles, el mar estuvo como nunca y me bañé muchísimo aunque el pololo no me acompañó nunca..., incluso en la playa se preguntaban si era verdad que andaba acompañada y yo no dejo de pensar si las amigas de la Caro me creerán media loca... El Lucas aprendió a estar sin correa sin salir arrancando como loco. Y las noches fueron de piscolas compartidas, de los pololos hablando de WOW y de adicción colectiva a "Amor Ciego". Sí, es que en la familia tenemos eso de pegarnos todos juntos con los realities. Con Rodrigo sólo salimos una noche a comer rico al Puntamai y a la Canasta, y otra a tomar once-comida al Ayén con la Caro y el Pé. Y así de rápido se me fue la primera semana...

Al sábado siguiente nos fuimos a Los Andes, al cumpleaños n° 30 de la hermana de Rodrigo. Después del asado rico seguimos el domingo nuestro viaje a Rapel.

En Rapel arrendamos una casa que por las fotos prometía y cumplió todas las expectativas. Era grande y cómoda, con linda vista y una piscina perfecta para mí. Sólo tuvimos un problema: no teníamos juguera o coctelera, ni exprimidor... Pero como no podíamos dejar de tomarnos un sour a nuestra llegada nos las arreglamos con nuestras manos y un frasco para conservas. Igual nos quedó rico y me sentí al más puro estilo de "A prueba de todo" arreglándomelas con lo que encontraba...

Fueron ricos los días en el lago, aunque éste no estaba para nada en óptimas condiciones. A mí eso no me importó porque tuve todo lo que quería y días increíbles para compartir en éstas, nuestras primeras vacaciones. Después llegó la Cata y esperamos que le hayan servido estos días fuera de todo lo conocido.

Y ahora de vuelta al trabajo y a la realidad, con fuerzas para hacerle frente a todo lo que viene y muy feliz por lo que logramos formar...

Febrero

Por fin. Me voy de vacaciones a disfrutar de dos semanitas fuera de esta ciudad.

Destino: Maitencillo, Los Andes, Rapel.

Me voy a descansar, tomar sol y aprovechar de todo, pero sobre todo de compartir con el pololo.

Nos vemos en poco más de dos semanas!

Es rabia más que pena

Hay algo que siempre me ha llamado la atención y es la capacidad que tienen algunas personas para reírse de otros sin siquiera pestañear...

Creo en el respeto por los demás, sobre todo cuando hubo cariño de por medio, una relación. Pienso que lo más importante es ser muy cuidadosos cuando dejamos de querer a alguien, porque si bien estamos en nuestro derecho y nada evitará el sufrimiento del otro, no tenemos por qué pasar a llevar a esa persona que tenemos al lado.

Casi la mayoría hemos pasado en mayor o menor medida por ese sentimiento. No me pasó a mí, antes sí, no ahora, pero lo siento tan cerca que es casi lo mismo...

No puedo evitar la rabia al pensar en el cinismo extremo que tuvo para mantenerla engañada e ilusionada, para montar un show del que todos fuimos parte y dos días después hacerla caer... Me pregunto si será verdad eso de que en esta vida todo se paga... ¿justicia divina? No sé, no me queda tan claro que siempre sea así. Entonces, ¿la justicia por nuestras manos? Y ahí viene lo complicado de tener que plantearse qué pretendemos para limpiarnos de la situación y tratar de entender en quién se transforma esa persona que hasta hace poco lo era todo.

Y yo no tengo un consejo claro que darle porque estoy tan impactada que no lo asimilo... Tal vez porque no hay consejo que dar en un caso así... Supongo que la rabia servirá para no querer mirar atrás... Porque si se trata de ganar rabia él ha hecho el trabajo perfecto para recibirla por completo...

Yo también colapso

Me tiene chata esa canción de Juanes:
"Me enamora, que me hables con tu boca me enamora..."

Porfa que deje de sonar!

Rehabilitación

Tener licencia es algo extraño. Yo nunca había faltado un día por enfermedad. No, yo iba a trabajar con tos extrema, estornudos exagerados y fiebre. Pero ahora fue diferente. Después de mi paso por la clínica el doctor decidió que tenía que quedarme tres semanas en la casa.

Los primeros días fueron de flojera, aburrimiento, dolor y descanso. No me podía mover mucho y caminar menos, y me imaginé que la cero actividad iba a causar estragos en mi cuerpo. Ok, para las vacaciones iba a llegar en las peores condiciones y de mis meses de gimnasio no iba a quedar nada.

Pero no. Me obligaron a 10 sesiones de kinesiología en la casa y no me quedó otra... Lo mejor, resulta que ahora pilates es todo y hasta la rehabilitación se hace con pelota, elásticos y demases. La Ximena me tiene haciendo ejercicio como nunca, viene todos los días, me enseña cosas que no tienen nada que ver con mi cadera y deja en mi casa todos sus artículos para que siga trabajando. Y como no tengo nada más que hacer en el día, me entretengo tratando de mejorar mi elongación que a todo esto no anda nada de mal. A ver si algún día el sobrenombre de Nadia deja de ser irónico...

De la cadera todo bien. Mejoro más rápido de lo normal y ya estoy dejando los bastones para caminar. Me dicen que mis logros son notables y yo obvio que me creo la muerte porque por fin la salud me juega a favor.

Ahora miro mi futuro, las dos semanitas de vacaciones con el pololo a destino desconocido por ahora y creo que podré estar en las condiciones que quiero. Que llegue febrero no más.

Vida nueva

Llegó el momento. Estamos a pocos días que mi hermano emprenda nuevos rumbos y hasta ahora no soy capaz de asumirlo.

A veces, en la vida, las oportunidades llegan una vez y nada más. A mi hermano le llegó justo ahora y optó. Eligió salir de acá y hacer una vida en Quito, por un año o tal vez más, para tener una vida mejor, volver y comprar la casa que siempre soñó...

Es esto de crecer y tener que armar tu vida, madurar y trazar tu camino... Y yo en este momento pienso en el miedo de no tener su fortaleza a mi lado, aunque a veces no estuviéramos de acuerdo... Se va y me haré cargo yo hasta de lo que no quería y se va como tantos otros que ya han partido, que se fueron por un tiempo y salieron para siempre de mi vida. Al menos con el hermano eso no puede pasar.

Y yo ahora sólo espero que le vaya bien, que ésta sea una despedida alegre y que para mediados de este año pueda ir a verlo como estoy planeando... Nada mal un viajecito a la mitad del mundo.