Cambiando de aire

Una importante Tarjeta de Crédito nos ha metido en la cabeza que "la vida es ahora"... y yo le encuentro toda la razón. Haciendo caso de la publicidad decidí no esperar más y empezar a hacer temblar a ese pedacito de plástico que ocupa un lugar en mi billetera... Pero como no soy tan buena para las deudas pago en una cuota con los ahorros del año...

Y me voy. Con otra promoción, pero de una aerolínea, cruzaré la Cordillera de Los Andes y las compras navideñas las haré en la capital del país vecino. Porque esta vez me di cuenta que sí, la vida es ahora y para mí el tiempo parece ser menos que para los demás. A eso se le suman los muchos fines de semana de trabajo que me han dado la posibilidad de juntar días para pedirlos, como en este caso, cuando los necesite.

Armar un viaje tiene esa grata sensación mientras pienso en la maleta que llevaré, las cosas que compraré y la compañía que tendré. Sí, porque ahora que soy grande invité a mi mamá como regalo adelantado de pascua... Allá estaremos las dos, en un viaje que creo todas las madres e hijas deberían hacer en algún momento de sus vidas... Porque nada es suficiente para agredecerle todo lo que me dio, pero como pueda lo voy a intentar...

Viaje, alojamiento, comidas y compras... tantos dólares... Ver la cara de sorpresa de mi mamá cuando le mostré los pasajes... No tiene precio...