lunes, octubre 10, 2005

Un feriado

Hoy el día está como para ir a dar un paseo y tomar helados. Me encantan los helados, esos ricos del Sebastián, por ejemplo. Hubo una época en que los tomaba varias veces en una semana, era como un panorama obligado. Por suerte en aquellos días mi cuerpo no asumía kilos demás, así que las cosas eran simples.

Hoy que está bonito sólo me hace falta algo de compañía para poder compartir. Ayer, en cambio, tuve una tarde entretenida. Con la Francesca fuimos al Estadio Español a la celebración del día de la raza. Dimos vueltas, tomamos sangría, comimos buñuelos ultra aceitosos, vimos a la Loreto bailar su baile riojano y aprovechamos bien la tarde. Después me vine temprano para mi casa. Es que con estos días y este horario de verano dan ganas de hacer más cosas, sobre todo cuando me resisto a la idea de embalar para el próximo cambio de casa...

1 comentario:

Anónimo dijo...

Mi eterna amiga Sol, cuando leo lo de los helados me acuerdo cuando celebrabamos los 16 de cada mes, eso q solo tu y yo sabemos, jiji.
Parece q no soy muy buena para escribir en estas cosas, pero aqui encontre otra forma de decirte lo que te repetido siempre, cuando quieras y donde quieras amiga.
Cuando te decimos q puedes contar con nosotras para lo que quieras, es verdad, no son solo palabras pq pucha q hemos pasado cosas juntas.
Bueno Sol como te puse una vez en tu otro blog, a mi el periodismo solo me ha dado cosas buenas, me ha dio a mis 5 grandes amigas del alma y a mis 5 hermanas del corazon. Y por ellas cualquier cosa, tu sabes...Cuando quieras y donde quieras...Te quiero mucho amiga.