Empieza la función, me pongo mi máscara y salgo a jugar. Como en una obra de teatro sólo me dedico a actuar mi papel, ese que siempre he interpretado. Todo funciona mejor cuando no incomodamos.
Tal como hablamos el otro día con la Anita, creo que estaba haciendo demasiado reales a mis problemas y siempre es más fácil guardarlos y seguir adelante que hacerse cargo de ellos. ¿Esto es el optimisto o simplemente una forma de escapar?
Vamos, ahora sí que se puede...
lunes, octubre 24, 2005
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
Me acordé del síndorme "escapar de uno mismo". A veces uno quisiera irse muy lejos y dejar todos los problemas donde están... el inconveniente -y lo he comprobado- es que cuando uno huye llega al otro lado y todos los conflictos siguen ahí. Es como un video de la Julieta Venegas donde un montón de bichos de extraño origen igualmente la rodean pese a recorrer kilómetros en auto (no me acuerdo el nombre de ese tema). Conozco a una mujer que para huir de todos sus rollos soñaba con irse a estudiar a París, y finalmente se fue. Ella no quería asumir que irse lejos no la desconectaba de ella misma... es que sería muy bueno retirarse y que ese otro yo ideado en la cabeza hiciera todo a la perfección, como la mascara con la que interpretas tu montaje diario.
Publicar un comentario